Desde sus comienzos, Alexis se mostró fiel a un contenido simple pero efectivo: situaciones de pareja, escenas exageradas de la vida diaria, frases típicas uruguayas y una pizca de absurdo bien manejado. Su estilo descontracturado y sin filtro le permitió destacarse en una plataforma saturada de contenidos similares, construyendo una comunidad genuina que se ríe, lo comenta y lo desafía.

Lo que diferencia a Drewerd de otros influencers es su vínculo real con la gente. No solo genera contenido: lo co-crea con su público. Muchas de sus ideas nacen de comentarios de sus seguidores, y no es raro verlo responder, improvisar o lanzar un nuevo video a partir de lo que le proponen. Esa cercanía y frescura son parte esencial de su éxito.

Su impacto digital no pasó desapercibido. Alexis fue convocado para integrar la Selección Uruguaya de Creadores de Contenido, un equipo conformado por influencers nacionales que viajó a Colombia a representar al país en eventos especiales y partidos amistosos contra otros equipos de creadores latinoamericanos. En este torneo regional, Drewerd demostró que el humor también puede cruzar fronteras, sumando una experiencia única que mezcla deporte, cultura digital e intercambio internacional.

A pesar de su crecimiento y legitimidad, Alexis ha sido crítico con TikTok por no otorgarle la verificación oficial. Según él, la plataforma rechazó su solicitud alegando falta de videos virales recientes, a pesar de tener una comunidad sólida y comprobable. Además, alertó sobre cuentas falsas que intentan estafar a usuarios usando su imagen, una problemática cada vez más frecuente entre creadores populares.

Alexis Drewerd es una de las voces jóvenes más auténticas del ecosistema digital uruguayo. Su paso de tiktoker a representante nacional en la Selección de Creadores demuestra que el contenido con identidad, humor y cercanía sigue teniendo impacto real. Más allá de algoritmos y etiquetas, es la conexión con la gente lo que lo convierte en una figura influyente.