A través de artículo 225 y promovida por el diputado del Frente Amplio, Nelson Larzábal, se presentó en la Cámara de Representantes una disposición que fue apoyada por Cabildo Abierto y que no estaba integrada en la redacción original de la Rendición de Cuentas.

Este artículo establece que la instalación de una planta industrializadora de uva con el objetivo de apoyar y “salvaguardar” a los productores más pequeños, el cual fue promovido por Centro Nacional de Viticultores del Uruguay en el Parlamento.

En el proyecto, se encomienda al Instituto Nacional de Vitivinicultura (Inavi) a llevar a cabo un llamado público para la instalación de la planta industrializadora de vinos que se utilizaría para la elaboración de mosto concentrado, jugo y azúcar de uva. Por otro lado, el instituto fijaría un porcentaje anual de la producción para destinarlo a esa planta que tendría que ser mayor a los seis millones de kilos. Con esto, se abastecería a las bodegas uruguayas para las correcciones enológicas de sus vinos.

El valor de la planta costaría unos 1,3 millones de dólares y tiene el objetivo de proteger a los pequeños productores, según estableció el senador cabildante, Guillermo Domenech, durante el debate del proyecto en Cámara Alta en la Comisión de Presupuesto y Hacienda. “Se trata de defender al pequeño productor, para que pueda colocar a precios más razonables”, explicó el senador.

En ese sentido, Domenech aseguró que “es una idea que puede revertir esa tendencia a la concentración de la propiedad comercial en la que está embarcado el Uruguay”, algo que remarca como “evidente” en torno a la realidad de que existen pujas de intereses.

¿Qué dijo la coalición?

Este proyecto se intentó promover en Diputados por parte del partido de Manini Rios, pero no tuvo éxito, es por eso que se sumaron a la disposición cuando fue presentada por el Frente Amplio. Con esto, la coalición reaccionó, nuevamente, en contra de las acciones del partido más rebelde de la unión oficialista.

El diputado por el Partido Nacional, Rodrigo Blas, estableció que el proyecto tiene una muy mala redacción y lo caracterizó de “inentendible”. Por otro lado, cuestionó que se quiera retirar obligatoriamente del mercado una cantidad determinada de producto para luego fijarle un precio. “Es de las peores soluciones que nos podemos imaginar en una economía liberal”, remarcó.

Por otro lado, el senador por el Partido Colorado y ex ministro de Ambiente, Adrián Peña, estableció que la medida terminará perjudicando al sector que pretende ayudar y pidió que el texto sea retirado del Senado. “Es como tirar un tiro en el pie”, sentenció el senador.