El PIT-CNT y otras organizaciones sociales hicieron un acto en la céntrica Plaza Libertad de Montevideo "en defensa de la democracia y en contra de la corrupción", como respuesta a la crisis abierta en el Gobierno de Luis Lacalle Pou por la entrega del pasaporte al narcotraficante Sebastián Marset en 2021 y los intentos de ocultar pruebas a la justicia.
"El país atraviesa una grave crisis política y un deterioro institucional por responsabilidad del gobierno; hablamos del caso más escandaloso dentro de una larga sucesión de eventos de corrupción protagonizados por distintos estamentos del Poder Ejecutivo, ante el cual debemos decir con claridad que debe llegarse hasta las últimas consecuencias en el esclarecimiento de los hechos”, señaló el texto que se leyó en el acto.
La declaración, que leyó el titular de la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua (Fucvam), Gustavo González, exige que la investigación apunte a “las responsabilidades de todas las personas involucradas y del propio presidente de la República".
El texto advierte que "el gobierno le entregó un pasaporte a un narcotraficante que ahora está prófugo, le mintió al Parlamento y a la ciudadanía y lo sigue haciendo”.
“El gobierno intentó ocultar pruebas a la justicia. Elaboró una estrategia institucional política y comunicacional con participación directa de la Presidencia de la República, para mentir, ocultar y destruir pruebas. Gravísimo", remarcó el PIT-CNT.
Al acto se sumaron algunos dirigentes del opositor Frente Amplio, entre ellos su titular, Fernando Pereira; la intendenta de Montevideo y precandidata presidencial, Carolina Cosse, y el diputado Gonzalo Civila.
Pereira dijo que “no hay nada más fuerte contra el escándalo que escandalizarse, y escandalizarse supone diversos niveles de protesta", según el diario El Observador.
Una de las pancartas de mayor tamaño en la plaza señalaba: "Corrupción, narcotráfico, tráfico de influencias, abuso y explotación infantil. Luis (Lacalle Pou): No te comiste un garrón. Te comiste la corrupción".
Y uno de los volantes repartidos en el acto afirmaba que "la gente ya se cansó: no hay confianza en este gobierno".
"La gente se cansó: ya no hay confianza en este gobierno. Ejemplos sobran… Regalaron el puerto a una multinacional. El Ministerio de Turismo contrató a una agencia de publicidad fantasma. Le dieron el pasaporte a un narco. El jefe de seguridad de la Presidencia armó una asociación para delinquir en la Torre Ejecutiva", denunciaba el volante.
El escándalo estalló a partir de material que la exvicecanciller Carolina Ache entregó a la justicia, y llevó a las renuncias del canciller Francisco Bustillo; del número uno y dos de Interior, Luis Heber y Guillermo Maciel; y del asesor presidencial Roberto Lafluf.
Frente al cuestionamiento de algunos sectores del oficialismo por la adhesión a la protesta del FA, la alianza opositora había señalado ayer que "la movilización social es pilar de la democracia plena y reclamar es un derecho legítimo en el marco de las libertades en Uruguay”.
“Una ciudadanía movilizada e informada permite encontrar las mejores soluciones y garantizar un mejor funcionamiento democrático", expresó el FA, según informó la agencia argentina Telam.