Polémica por la baja cantidad de niños que concurrió a comedores escolares durante las vacaciones
Durante las últimas vacaciones de julio -del 11 al 15- fueron 11913 los niños que comieron en alguna de las 153 escuelas definidas como sede. Mientras que desde el oficialismo se utilizaron esos datos para plantear que los casos de hambre no son tan extendidos, desde la oposición fueron atribuidos a problemas de gestión en los comedores.
Según había informado previo al inicio de las vacaciones la subdirectora de Primaria, Olga de las Heras, la cobertura abarcaría 21 mil alumnos preinscriptos con un “menú muy variado de comida invernal”. De todos modos aseguró que, si algún niño estaba anotado al Programa de Alimentación Escolar pero no había podido inscribirse en estas vacaciones, podía concurrir al centro y tener su almuerzo: “Nadie se va a quedar sin alimentación”.
Pereira, aclará porque fue tan solo el 6 % de niños a los comedores escolares durante estas vacaciones.Vos mentís cuando dices que hay hambre en Uruguay ? o la Intendenta Cosse con su castrante cobro del boleto a escolares en vacaciones, sembró hambre entre Ellos ? Aclará !!! pic.twitter.com/B6ON5xn16X
— Hugo Delgado Pacheco (@hugomdelgado59) July 15, 2022
Lo sucedido fue distinto a lo planificado y el debate no estuvo en torno a la falta de alimentos, sino más bien respecto a la baja concurrencia: asistieron un 57 por ciento de los anotados y un seis por ciento de los usuarios habituales de esos comedores.
Desde la oposición interpretaron los números como una muestra de la mala gestión de la Administración Nacional de Educación Pública (Anep) respecto al funcionamiento de los comedores en vacaciones. El ex consejero de Primaria y actual director del Instituto Nacional de Evaluación Educativa (Ineed), Pablo Caggiani, criticó la forma en la que se dispone el acceso a la alimentación.
El mecanismo de pago elegido durante el 2021 fue a través de distintas redes de cobranza y atribuía 2,19 dólares por día por niño. Sin embargo, la diputada por el Frente Amplio, Lilián Raquel Galán Pérez, afirmó en su momento que un 39 por ciento de los beneficiarios cobró ese monto porque no se enteraron del mecanismo o por retrasos en el depósito. Finalmente, cerca de 1,5 millones de dólares fueron devueltos por la Anep debido a todas aquellas familias que no cobraron la prestación.
Este año se volvió a cambiar el mecanismo y se eligieron algunas escuelas sede en las que retirar los alimentos. Según Caggiani, no se contemplaron distintos factores como el transporte público para llegar al lugar: “Tenemos un asunto de cómo se focaliza y cómo se comunica la política pública”.
El ex consejero de Primaria criticó la burocracia existente en la gestión, que implica “días sin almorzar” para aquellos dispuestos a iniciar el trámite. “Hay que pedir autorización a La Haya”, ironizó.
La interpretación del oficialismo fue muy distinta y se basó en justificar a través de los datos que los problemas de alimentación no están extendidos entre la población. Según un integrante del Consejo Directivo Central de la ANEP, Juan Gabito, “estas cifras desarticulan los discursos de quienes dicen que hay tanta hambre y pobreza”, informó El Observador.
En tanto, el diputado por el Partido Colorado, Felipe Schipani, aprovechó para decir por redes sociales que “el relato del hambre” utilizado por el Frente Amplio y la Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria “se cae a pedazos”
